En GARMAT somos una empresa altamente especializada en mejorar el aislamiento térmico de fachadas. En definitiva, trabajamos para que tu fachada sea todo lo eficiente que debería ser, ofreciendo protección frente al exterior. Todo lo necesario para mejorar el confort de cualquier familia en el interior de su casa.
Gracias a todo el tiempo que llevamos acumulado en este campo, podemos contarte que son varias las soluciones que tenemos a nuestro alcance para aumentar el aislamiento térmico de un edificio. Cada una de estas alternativas cuenta con sus puntos fuertes propios
El Sistema SATE, ideal para el aislamiento térmico de fachadas
Seguramente hayas escuchado hablar de él a familiares, amigos o profesionales. En nuestro blog también encontrarás multitud de posts relacionados con el Sistema SATE. Se trata, de largo, de una de las aplicaciones más beneficiosas por la que podemos apostar. Básicamente se trata de un revestimiento aislante de múltiples capas y que se encuentra protegido por un mortero.
Entre las ventajas del Sistema SATE hay que destacar que se eliminan los puentes térmicos, la condensación interior y la formación de moho, que no trastoca ni minimiza el espacio interior de las viviendas o que se protege la estructura del inmueble.
La fachada ventilada, un poderoso aliado
Se trata de la segunda alternativa más demandada y utilizada para mejorar el aislamiento térmico de fachadas. Se trata de la fijación de una capa de aislamiento con estructura metálica. Esta estructura contará, al mismo tiempo, con una hoja de protección separada del aislamiento por una cámara de aire. El resultado es la creación de una circulación del aire por convección.
Con la fachada ventilada también se eliminan los puentes térmicos, se protege a la fachada del edificio y a su estructura, se eliminan los problemas de condensación y se deja intacto el espacio interior de las viviendas.
Más sistemas de aislamiento térmico
Antes de terminar no podíamos olvidarnos de otros dos sistemas de aislamiento térmico de fachadas que no podemos olvidar. En primer lugar, nos encontramos con el aislamiento por inyección en cámara, que se basa en la utilización de espuma de poliuretano, lana mineral o celulosa en la cámara de aire de las paredes. El segundo es un sistema de aislamiento térmico interior que se aplica directamente sobre las paredes interiores.
