Los obstáculos y obstrucciones son impedimentos que lastran cualquier tipo de construcción. Más todavía los edificios de viviendas. Por eso, desde el Grupo Garmat, como refrentes en este campo, nos gustaría aprovechar estas nuevas líneas de nuestro blog para hablaros sobre las principales barreras arquitectónicas en los hogares. ¿Preparados? ¡Comenzamos!
Lo primero que tenemos que saber es que una barrera arquitectónica supone un lastre para cualquier construcción, no solo para las viviendas. Además, si nos paramos a pensar, son signos de una falta total de empatía con personas que padecen algún tipo de discapacidad física o con los mayores. En nuestras manos está obtener un mundo más accesible y sencillo para todos, ¿verdad?
Quizá hace veinte o treinta años, estos problemas no tuvieran tan fácil arreglo. Por suerte, hoy en día contamos con las soluciones adecuadas para evitar obstáculos en el ámbito privado. Pero, ¿cuáles dirías que son las principales barreras arquitectónicas en los hogares?
Es posible que en una comunidad de propietarios se dé una o varias obstrucciones que impiden el fácil acceso a mayores o personas de movilidad reducida. Estas deficiencias serán señaladas en cualquier Informe de Evaluación de Edificios (IEE) al que se someta el inmueble, debiendo ser subsanadas.
Una de esas principales barreras es la existencia de escalones entre la acerca y el portal del edificio, impidiendo un pase sencillo a la hora de entrar o salir del mismo. Aunque cueste creerlo, este inconveniente está presente un notable porcentaje de inmuebles de nuestro país.
Pero entre las principales barreras arquitectónicas en los hogares también podríamos señalar, por ejemplo, los escalones intermedios en un acceso obligado o también situar el ascensor comunitario después de alguno de los obstáculos anteriormente mencionados.
Este último hecho, instalar un ascensor después de cualquier obstáculo, es uno de los problemas que hay que corregir cuanto antes, puesto que supone una situación dolorosa para todas aquellas personas con problemas. Se estima que en España hay alrededor de 100.000 personas que apenas salen a la calle por imposibilidad de salvar obstáculos como este.
En último lugar y para cerrar este post, desde GARMAT no nos podíamos olvidar que aquellas soluciones que, lejos de reparar un problema, lo empeoran. Nos referimos, por ejemplo, al diseño de rampas mal planificadas y ejecutadas.
